MARTIN

Vamos a hablar ahora de una de las películas que me jodió la infancia: Martin, de George A. Romero.

Esta película de 1977, desasosegante, desagradable, e incomoda a más no poder, nos cuenta la historia de Martin, un joven que cree ser un vampiro y como tal intenta beber la sangre de cuanta moza se cruza en su camino. Claro está, Martin no tiene ningún poder sobrenatural y por lo tanto necesita sedar a sus victimas y cortarles con cuchillas de afeitar para poder libar su hemoglobina...

Aquellos que me conocen bien saben de mi fascinación/aversión por las hipodermicas y las cuchillas de afeitar...¿Tendrá alguna relación haber visto esta pelicula a los diez años, a altas horas de la madrugada, solo, y con fiebre? Seguramente...Aunque a día de hoy puedo asegurar que me siguen encantando las historias de vampiros, casi tanto como miedo me dan las gafas del maestro Romero!!!

P.S.- Para seguir con los cambios de títulos delirantes (honor patrio) el film se estrenó aquí con el sugestivo título de "La noche de los vampiros vivientes" (sic)